Jacky Bracamontes ha celebrado una década de matrimonio con Martín Fuentes y la crianza de sus cinco hijas con una sólida relación que ha enfrentado los desafíos propios de la vida pública.

La clave, según Jacqueline, ha sido la paciencia, el amor y saber elegir las batallas que vale la pena librar.

Ella enfatiza la importancia de la comunicación abierta para resolver diferencias y mantener la armonía en la pareja, reconociendo que ambos han evolucionado y cambiado con los años.

Para mantener viva la chispa del amor después de tener hijos, Jacky sugiere que todas las parejas encuentren momentos para conectar emocionalmente.

Aunque viajar juntos se ha vuelto más complicado con su numerosa familia y las agendas ocupadas de ambos.

Ella destaca la importancia de tomarse pequeñas escapadas para fortalecer la relación.

Jacky prioriza la crianza de sus hijas como su principal responsabilidad, buscando proyectos laborales que le permitan estar presente en sus vidas.

A pesar de sus compromisos profesionales, Jacky encuentra un equilibrio entre su carrera y su familia.

Selecciona cuidadosamente sus proyectos para asegurarse de no estar lejos de sus hijas por períodos prolongados.

La comunicación abierta y el apoyo mutuo han sido fundamentales en su matrimonio con Martín.

En conclusión, la receta de Jacky Bracamontes para un matrimonio duradero incluye paciencia, amor y la capacidad de elegir las batallas adecuadas.

Además, destaca la importancia de mantener viva la relación con pequeñas escapadas en pareja.

Su enfoque en la crianza de sus hijas refleja su compromiso familiar, combinado con una carrera profesional que maneja de manera equilibrada y consciente.